Contrato de formación y aprendizaje: ¿qué es y en qué consiste?
El 28 de diciembre de 2021 entró en vigor el Real Decreto Ley 32/2021 que introdujo una nueva Reforma Laboral que afectó al contrato de formación, que pasa a llamarse contrato de formación en alternancia y tiene el objetivo de compatibilizar trabajo y formación para fomentar la inserción laboral de la juventud.
Requisitos que debe cumplir el/la joven
- Tener menos de 30 años
- No tener un título formativo oficial relacionado con el puesto
- No haber tenido un contrato de formación anteriormente del mismo nivel formativo, ni en la misma categoría laboral
- No haber trabajado en el mismo puesto en la empresa durante más de 6 meses
Ventajas del contrato de formación para la empresa
- Bonificación a ser contratado indefinidamente de 1500€ o 1800€ durante 3 años
- Deducción del 75% o 100% de las cuotas empresariales a la Seguridad Social por contingencias comunes (según el número de empleados)
- Reducción del 100% de las cuotas de los trabajadores a la Seguridad Social durante toda la vigencia del contrato
¿Con qué formación se puede compatibilizar el trabajo en el nuevo contrato de formación?
Con el nuevo contrato de formación en alternancia, se podrá combinar el trabajo con las siguientes formaciones (siempre y cuando el puesto laboral esté directamente relacionado con el ámbito de estudios):
- Estudios formativos
- Formación profesional
- Certificados de Profesionalidad
- Especialidades formativas del Sistema Nacional de Empleo
Otras características del Contrato de Formación
- El contrato podrá durar desde 3 meses, hasta un máximo de 2 años.
- Distribución de la jornada: 1r año 65% trabajo y 35% formación; 2º año 85% trabajo y 15% formación.
- La jornada podrá ser a tiempo completo o parcial (siempre respetando los porcentajes mencionados)
- No se podrán realizar horas extras, ni trabajo nocturno.
- Se elimina el periodo de prueba de los contratos formativos.
- El salario dependerá del convenio colectivo y en ningún caso podrá ser inferior al 65% u 85% sobre el SMI vigente.
El contrato de formación y aprendizaje, un aliado para combatir el desempleo juvenil en España
Actualmente España es el segundo país de la Unión Europea con más desempleo juvenil (29,4%) y, además, hay más de 900.000 jóvenes que ni estudian ni trabajan. Por otro lado, eventos de diferente índole, desde la pandemia hasta la guerra actual en el este de Europa, han puesto a prueba la resiliencia del conjunto de la sociedad y en especial la de los jóvenes.
El desempleo y la baja cualificación lastra su futuro, ya que aunque sean jóvenes, llegan a un punto que tienen que avanzar, crecer, pagar un alquiler o incluso pagarse la comida diaria. No todos tienen una estructura que les permita estudiar sin trabajar. Muchos están en situación de vulnerabilidad y el contrato de formación les brinda la oportunidad de ganar un sueldo mientras se forman en un oficio.
Por qué beneficia este tipo de contratos a los sectores con vacantes sin cubrir
Por otro lado, hay muchos sectores necesitados de talento joven. Precisan renovar plantilla para avanzar y generar ese valor productivo necesario. En cambio, no encuentran a jóvenes con la formación adecuada para los puestos de trabajo ofertados, y hay muchas vacantes que se quedan sin cubrir.
El contrato de formación se presenta como la solución a esta problemática, complementando las actividades en la empresa con estudios especializados en el sector que pueden poner en práctica a la vez que se forman.
Nuestro proyecto piloto en el sector de la Automoción
Desde Fundación Exit, conjuntamente con Fundación Adsis y el SOC, mediante el Proyecto PASSWORK, creamos en plena pandemia un proyecto piloto que dio forma a un itinerario en el sector de Automoción. El propósito era dotar de una formación necesaria para este sector a jóvenes aprendices de Chapa y Pintura, para reducir el desempleo de jóvenes de 18 a 24 años.
El proyecto piloto se basó en realizar una formación en modalidad dual mediante un Certificado de Profesionalidad compaginado con el trabajo. Participaron jóvenes vulnerables que tenían necesidad de aprender un oficio y de trabajar. El elemento diferenciador fue que, desde el primer día, los jóvenes tenían contrato (en modalidad de formación y aprendizaje) con una duración de 1 año. Es decir, se formaban mientras trabajaban y con un sueldo fijo cada mes. 7 jóvenes (de un total de 15 participantes) consiguieron dicho contrato. Al principio se formaron, luego entraron en modalidad de 3 días en la empresa, más 2 días de formación, para finalmente estar a jornada completa.
Beneficios del proyecto piloto y los contratos de formación para las empresas
El proyecto consiguió mantener a los jóvenes motivados durante toda su duración, y nos demostró que, combinando el contrato de formación con los estudios en jóvenes con talento pero con falta de oportunidades laborales, las empresas están involucradas en la formación desde el inicio y forman parte del proceso evolutivo del joven. Son la figura del aprendiz del siglo XXI, la misma que ya está presente en otros países del norte de Europa.
Susana Hidalgo
Responsable de Taller en Lervertouch y una de las tutoras del proyecto en la empresa:
¿Por qué os decidisteis a participar en este proyecto?
A nuestra empresa le gustan los retos y evolucionar con nuestra sociedad. La mejor manera de aportar nuestro granito de arena es sacar las mejores cualidades del equipo humano para así enriquecernos y seguir sumando éxitos. Nuestra sociedad está inmersa en un proceso constante de cambios y LT quiere estar en primera línea e innovar y aumentar el rendimiento empresarial.
¿Por qué decidisteis contratarlo?
Como hemos comentado anteriormente, creemos en el potencial de las personas que trabajan en nuestra empresa. Cada uno de manera individual tiene unas cualidades especiales y sumadas al trabajo en equipo se potencian mucho más. Este ha sido el caso de Jonathan, que ha dado lo mejor de él para superarse así mismo y así sumar en el equipo.
¿Cómo fue la evolución de Jonathan Javier en el transcurso del proyecto?
Jonathan, como cualquier persona que empieza en una nueva empresa, tenia miedos e inseguridades y esto a veces puede paralizar a las personas. Con ayuda de todas y cada de las personas que forman LT, ha podido adaptarse a la situación y dar lo mejor de sí mismo. El reto es conseguir la simbiosis para potenciar cada uno de los diferentes perfiles de LT, y con Jonathan se ha conseguido.
¿Volverías a hacerlo? ¿Por qué?
Sin lugar a dudas lo volveríamos a hacer. Cualquier reto entraña riesgos, miedos y a veces puede no funcionar. Pero en el riesgo está la evolución y el enriquecimiento para sumar éxitos y proponerse nuevas metas.
Beneficios del proyecto piloto y los contratos de formación para lxs jóvenes
El proyecto también ha servido para dar una salida laboral a jóvenes con barreras para acceder a un empleo de calidad, ya que ya llevan un año trabajando en los talleres participantes. Esta opción proporciona a jóvenes que por diferentes motivos no tienen la posibilidad de estudiar una formación reglada que les proporcione el oficio deseado, una oferta formativa práctica y motivadora.
Jonathan Javier Guairacaja Simbana
Participante del proyecto piloto:
¿Cuál era tu situación antes de apuntarte al proyecto?
Como todo chico joven, no sabía qué hacer o estudiar. Lo primero que tenía en mente era trabajar porque ya no tenía la misma motivación que cuando era adolescente y necesitaba un empujón para seguir estudiando.
¿Estabas buscando trabajo, formación?
La verdad es que pensaba en trabajar porque en ese momento no tenía trabajo y ya había hecho todo tipo de formación.
¿Y por qué decidiste inscribirte?
Me inscribí porque me gusta todo lo que tiene que ver con la automoción, así que me dije: “me voy a dar otra oportunidad”. También debo dar las gracias a mi padres porque me siguieron motivando y animando a que me inscribiera en la formación.
Durante el proyecto, ¿todo lo que ibas aprendiendo en la formación, lo fuiste incorporando en tus tareas de trabajo en Levertouch?
Sí, durante el proyecto todo lo que aprendía en la formación lo aplicaba en la empresa, pero los compañeros de trabajo me enseñaban la forma más fácil de hacerlo. Eso me motivaba y me hacía mejorar más rápido.
¿Crees que la posibilidad de trabajar mientras estudiabas y haberte podido quedar en la empresa posteriormente, te ha motivado a implicarte más en los estudios?
¡Estudiar y trabajar es posible! Además, me ayudó a aplicarme un poco más en los estudios, ya que veía que lo que aprendía eran cosas importantes para el día a día en el trabajo.
Ahora es tu turno: incorpora jóvenes con talento a tu plantilla con el nuevo contrato de formación a través de Fundación Exit
Los jóvenes necesitan oportunidades que les permitan avanzar, tanto a nivel formativo como laboral. Las empresas necesitan a jóvenes con potencial, orientados y motivados. En Fundación Exit te ayudamos a encontrar el talento joven que necesita tu empresa para seguir creciendo. Amplía tu plantilla con el nuevo contrato de formación: tu empresa gana, los jóvenes ganan y la sociedad también.
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